Los cuencos de cuarzo se componen de un 99,9% de cristal de cuarzo puro. Este cristal (silicio) posee una gran afinidad con el ser humano. El silicio del cuarzo es un mineral presente en nuestro organismo, en nuestros huesos y cartílagos, en el cabello, la piel, las uñas, los dientes…Por lo tanto, nuestro cuerpo tendrá una gran capacidad de resonancia al exponerse a los cuencos de cuarzo.
El sonido que transmiten los cuencos de cuarzo es tan puro que la mera acción de hacerlos sonar se transforma en un acto sagrado. Este sonido, se expande a su alrededor y viaja por el espacio, interfiriendo con otras ondas de energía que encuentra en su camino. De ese modo equilibra y armoniza a las personas y también el ambiente que nos rodea.
Comercialmente se han estandarizado las siete notas musicales con diferentes tamaños en diámetro. Recomendamos tamaños a partir de 20 cm, ya que de 15cm y 18cm son demasiado pequeños y al pesar poco resultan inestables para tocarlos.
Si quieres también podemos asesorarte en la elección del cuenco que mejor se adapte a tu caso concreto.
(Consultar tarifas para cuencos de otros tamaños distintos a los expuestos)